Debes haber visitado tu zoológico local para ver animales salvajes tras las rejas. Pero, ¿cuántos de vosotros habéis estado realmente en una jaula mientras grandes felinos deambulaban al aire libre? Esta es precisamente la escena del Santuario de Leones Glen Garriff.
Glen Garriff Lion Sanctuary es una organización sin fines de lucro. Se han dedicado al bienestar de la población de leones africanos en Sudáfrica. El santuario también ha ayudado en el estudio y aprendizaje sobre la especie.
Hay alrededor de 77 leones que son cuidados y viven en el santuario con sus familias. Glen Garriff les proporciona un hábitat natural donde viven toda su vida en un entorno protegido.
El santuario es bien conocido por su experiencia única en jaulas de plexiglás. Podrás experimentar y ver los leones como nunca antes. Podrás observar, oír y oler a los leones de forma segura sin temor a lastimarte.
Sólo dos visitantes pueden entrar a la jaula en un momento dado para observar a estos hermosos animales. Sin embargo, es una experiencia extraña para los leones ya que simplemente no pueden comunicarse con los humanos, que creen que son su refrigerio del día.
Sólo los visitantes mayores de 14 años pueden entrar en la jaula de cristal y disfrutar de una mirada de cerca a los majestuosos animales. Sin embargo, la experiencia depende de las condiciones climáticas y la disponibilidad del personal.
Hay pequeñas ventanas y agujeros circulares que te permiten ver muy de cerca a los leones. Así, trae la experiencia de estar con los animales en su hábitat natural. Las ventanas y los agujeros son seguros y demasiado pequeños para que pasen las patas del león.