Es una escena familiar durante todo el día: perros callejeros abriéndose camino por las calles sucias, confiando en la generosidad y empatía de quienes los rodean. Estos acantilados resilientes han dominado el arte de sobrevivir en un entorno exigente, desarrollando fuertes conexiones con las comunidades que habitan.
Según The Hiпdυ, el gobierno del estado de Kerala ha tomado medidas firmes para abordar el problema de los perros callejeros. Está previsto retirar sistemáticamente a estos perros de las calles en los 14 distritos de Kerala y reubicarlos en centros de rehabilitación especializados en todo el estado. Esta decisión se tomó debido a la cantidad de quejas de los vecinos sobre el creciente número de perros callejeros en sus barrios.
La decisión del gobierno de Kerala de construir centros especiales para rehabilitar perros callejeros ha llamado la atención. A pesar de enfrentarse a la oposición de diferentes sectores, incluido el gobierno central, las ONG y la Junta de Bienestar Animal, el gobierno de Kerala se mantiene firme en su posición. Él cree que es su derecho constitucional crear estas instituciones para abordar los problemas causados por los perros callejeros en el estado.
Esta elección ha provocado una nueva conversación sobre el bienestar de los animales callejeros y la responsabilidad de los gobiernos a la hora de abordar este problema. Algunos creen que es importante proteger a los ciudadanos y reducir el número de perros callejeros, mientras que otros sugieren que soluciones más compasivas y a largo plazo, como las iniciativas de esterilización y adopción, podrían ser mejores opciones.
La implementación de estos programas por parte del gobierno de Kerala plantea dudas sobre el impacto directo de los perros callejeros y sus interacciones en las comunidades en las que viven. Esto llama la atención sobre la necesidad de una conversación más amplia sobre cómo los humanos y los animales pueden coexistir en entornos humanos, considerando tanto la compasión como la seguridad pública.